Prepara tu hogar para los niños

La habitación del bebé tiene que ser también una habitación cómoda para los papás. La fórmula perfecta para que todos estéis a gusto y podáis disfrutar de vuestro bebé es un sillón cómodo para amamantarle o poder estar pendiente de él, una mesilla de apoyo para tener a mano todo lo que necesites y una buena iluminación, cómoda para vosotros, si queréis leer o necesitáis luz de trabajo para preparar algo y luz ambiental relajante para que el pequeño tenga dulces sueños. Así conseguirás crear una zona de relax en la que podrás descansar y recuperar fuerzas, ¡todo en uno!

La ropa del bebé es pequeña y delicada para que cuide de su piel. Un mueble dedicado solo a guardar su ropita es ideal para que no pierdas ni un calcetín y lo tengas siempre a mano en su habitación cuando sea la hora de cambiarse.  Utiliza un sistema modular que crezca a la misma velocidad que lo hace tu bebé, conseguirás un armario inteligente que durará mucho más tiempo y se adaptará a lo que tu hijo necesite, mes a mes y año tras año.

Los textiles cobran especial importancia estos primeros meses, ya que serán los encargados de acunar a tu bebé y de establecer gran parte de la personalidad de la habitación. Lo conseguirás con unas cortinas de colores cálidos que ambienten toda la estancia y una ropita de cuna (sábanas, fundas de almohada, incluso su propio pijama) con una textura muy suave ¡así seguro que reinarán los felices sueños!

Aunque tu bebé se sorprenda incluso con los rayos de luz que entran por la ventana sus ojos todavía se están adaptando al mundo. Por ello, acomodar la habitación con luz tenue e indirecta hará que puedan inspecionarlo todo sin miedo y tu puedas tener cuidado de él sin ir a tientas. Además puedes optar por lámparas de divertidas formas y colores que atraigan su atención, le estimulen y le construyan un bonito entorno de ensueño.

Deja que su diversión vuele hasta muy alto e instala un pequeño móvil sobre el cambiador o la cuna. Conseguirás un rincón de juegos perfecto y el bebé estará entretenido mientras le cambias el pañal o le aseas, asegurándote cero llantos y preparándolo en un momento. Si optas por situarlo sobre la cuna el bebé podrá entretenerse con las diferentes figuras y colores, que se harán con su atención y sus sonrisas.

¿Tienes el espacio justo? Piensa el la multifuncionalidad de los muebles para aprovechar al máximo cada centímetro. Por ejemplo, su cómoda para guardar la ropa puede servirte también de cambiador.

Sus objetos y ropa son pequeños, y esto nos puede llevar a perderlos fácilmente o a que se nos mezclen unos con otros. Si utilizas pequeños cestos o cajas conseguirás clasificar todas sus cositas y sacarle partido a algunos huecos: ¡evitarás el desorden y te permitirán encontrarlo todo más fácilmente!

Cada rincón desaprovechado de tu hogar es una oportunidad para llenarse de lo que los niños necesitan. Para ellos, soluciones de almacenaje y muebles de apoyo son fundamentales para que aprendan cómodamente a valerse por sí solos a medida que van creciendo. 

Por ejemplo, sácale partido al hueco de las escaleras para guardar el carrito del bebé; o aprovecha la entrada de casa para que, cuando tengan que aprender a ponerse y quitarse zapatos, mochilas, chaqueta e incluso paraguas tengan el espacio y los elementos imprescindibles para guardarlo y ponérselo de la forma más cómoda. Así, ¡cuando les toque hacerlo ya se sabrán los hábitos al dedillo!

La hora del baño del bebé es un momento en el que necesitas estar muy pendiente de él y tener jabones, esponjas, cremas y toallas identificados para que no se te escape ni un poco de funcionalidad. Trata de aprovechar el espacio al máximo situando la bañerita móvil en un sitio que te permita tenerla a mano y de forma ordenada.

Cuando acaban de dar a luz, las mamás necesitan más que nunca cuidarse y sentirse guapas. El vestidor juega un papel fundamental en ello, así que amplíalo para tus nuevas prendas con una barra, alguna balda extra en tu armario y unas cajas para clasificar los zapatos. Conseguirás reorganizar el espacio sin que reine el desorden si optas por cajas, módulos y perchas para rentabilizar el armario o vestidor ¡Sólo te quedará reorganizar y priorizar tus prendas favoritas cómodamente!

Con la llegada del bebé os quedaréis más en casa. Ahora el salón se convierte en vuestro centro de operaciones y la mejor forma de pasar allí más tiempo es preparar tu salón para ello.

El televisor pasa a ser un elemento clave de tu hogar e integrarlo en tu salón lo convertirá en la mejor forma de disfrutar del ocio en casa. No creas que la elección del sofá es para menos, recuerda que puede convertirse en tu segunda cama para descansar el resto del día. Opta por reposapiés o un modelo chaiselongue para mejorar tus siestas ¡si tienes tacto a la hora de elegir el sofá tu comodidad será total!

Con la llegada del bebé no está de más disponer de un poco de espacio extra. Reorganiza la casa de una forma inteligente, por ejemplo, traslada tu despacho a la habitación de invitados o dedícale un pequeño espacio en tu dormitorio, pasillo o cualquier rincón ¡conseguirás tener una habitación libre para el bebé sin renunciar a las funciones de antes! Así, tu hogar estará acomodado para todos.

Ser padres implicará pasar más horas en casa. La mejor forma de convertir tu hogar en tu lugar favoritoes creando un espacio social, íntimo y de ocio en la terraza. En ella siempre podrás compartir momentos agradables con la familia y los amigos que querrán pasar tiempo con vosotros cuando seáis uno más ¡será como estar en la terraza de tu restaurante favorito! Teniendo en cuenta la cantidad de metros de los que dispongas y nuestros sistema modular podrás crear desde un pequeño comedor al aire libre con plantas aromáticas y una rinconera a una mágica zona con pufs y cojines ¡lo que mejor se adapte a tu espacio!