Ante los espacios sin tabiques es necesaria una gran capacidad de organización y distribución de los espacios: puede ser creada instalando separaciones a través de los muebles, usando textiles o creando ambientes a través de la funcionalidad.
Un espacio diáfano tiene cientos de posibilidades de decoración, aunque de primeras puedas sentirte abrumado por el ambiente vacío. Si tienes la suerte de tener un gran loft por decorar, o grandes espacios en tu casa (como cocinas o salones), tienes muchas posibilidades encima de la mesa y nosotros te vamos a enseñar a jugar tus cartas.
Siéntete como años atrás en clase de dibujo: tienes un espacio en blanco y puedes rellenarlo ¡con lo que más te guste! Pero ten cuidado, esto no dura para un mes como la decoración para Navidad, esto dura años!
Índice
Tendencias de decoración para dividir espacios en una casa
La premisa más importante a la hora de decorar un espacio diáfano (ya sea la cocina, el salón o un loft entero), es crear pequeñas áreas con distintas funciones que separen los ambientes. Párate a pensar todas las funciones que necesitas que cubra ese espacio y así generarás los pequeños rincones que lo convertirán en algo acogedor: conversar, comer, descansar, cocinar, dormir…
Lo ideal para crear estas distintas áreas es que mantengas una decoración uniforme en todas ellas: un tono neutro para el ambiente y el mismo estilo en todo el espacio.
Otra premisa relevante es que, no por tratarse de un espacio grande te tienes que ver obligado a rellenarlo con muebles grandes: puedes escoger tus muebles favoritos sin importar su tamaño. Al crear pequeñas áreas, los muebles pequeños funcionan en conjunto. Fíjate en la altura, eso sí, porque combinar distintos tipos de alturas en tus muebles conseguirás marcar cada área de forma separada.
Los colores que escojas para las paredes también influirán en el ambiente. Como ya sabrás, los colores claros agrandan las estancias y los oscuros las hacen más pequeñas. Si los combinas puedes crear una estancia muy acogedora.
Una vez ya sabes de qué espacios diferentes quieres disponer en tu hogar, te preguntarás cómo distribuir los muebles para crear los rincones.
Puedes utilizar distintos recursos para separarlos, pero los más recurrentes son los sofás y las estanterías.
Los sofás delimitan muy bien el área de conversación de tu espacio: puedes hacer un grupo de muebles alrededor de la mesa de café, los sillones, la alfombra y el sofá. Recuerda no dispersarlos demasiado para no dar una sensación de vacío, pero tampoco te veas en la obligación de juntarlos mucho, porque al fin y al cabo ¡dispones de mucho espacio!
Las estanterías te permiten crear “falsas paredes” y además almacenar todas tus cosas dentro. Si juegas con la altura de las estanterías, puedes crear encimeras de trabajo entre la cocina y el área de comedor, por ejemplo.
No dudes en probar distintas combinaciones en un espacio, dividir áreas con textiles o con estanterías bajas que sirvan de encimera. ¡Las posibilidades son infinitas!
Ideas y ejemplos de decoración para separar ambientes sin hacer obra
Detrás del sofá
Detrás de un sofá no siempre tiene que estar una pared. Si separas el sofá de la ventana entrará más luz y podrás crear dos ambientes: uno para relajarte y otro para almacenaje bajo la ventana.

Sofá chaiselongue
Un sofá con chaiselongue es una gran solución si tienes un gran salón: disfruta a tus anchas de las mejores películas de domingo.

Vitrinas en el comedor
No menosprecies el impacto de una vitrina: si dispones de suficiente espacio, son un recurso llamativo para llenar de personalidad tus estancias y delimitar áreas.

Un vestidor en el dormitorio
Si dispones de un dormitorio muy amplio, reserva un espacio para instalar un vestidor y crear una “habitación anexa”: funcionará a modo de vestidor y no necesitarás levantar muros.

Una isla en la cocina
Las cocinas grandes tienen la posibilidad de instalar una isla en el centro de la estancia: puede servir como módulo de almacenaje, como espacio de trabajo e incluso como mesa de comer.

Cómo dividir espacios
En un baño grande, puedes dividir los espacios por tareas: un lugar para arreglarte, uno para relajarte, otro para bañarte, otro para ducharte… Deja volar tu imaginación si tienes un baño de ensueño y divide la estancia en porciones para convertirlo en un spa de tranquilidad.

Biombos con almacenaje
Una manera muy recurrente y efectiva de separar ambientes es usando biombos. ¿Pero y si además los biombos tuvieran una doble función de almacenaje?
Puedes crear las fundas con los textiles que más te gusten ¡y añadirle los bolsillos que quieras!

Armarios con doble función
Las paredes de tu armario pueden ser un buen separador de estancias: un muro que puedes mover de sitio sin necesidad de hacer obra. ¡Y no solo eso, también consigues almacenar de una forma muy discreta!

Utilizar el sofá
Tanto si quieres un espacio compartido donde charlar hasta altas horas de la madrugada, como si prefieres una superficie extensa para siestas desahogadas. Combinando todos sus módulos te puedes hacer el sofá a medida que mejor encaje en tu salón, y si tienes un espacio amplio puedes distribuirlo de la manera que mejor te valga.
Atrévete a separar ambientes a través del sofá, combinando sus respaldos o colocando sus chaiselongues para hacerlo más amplio. ¡No le pongas límite a tu descanso!
Si te haces estanterías a medida, ¿por qué no hacer lo mismo con los sofás?
